sábado, 19 de marzo de 2016

Habladurías










Muchos hablan a su espalda,
tergiversando los hechos,
y algunos hasta se atreven
a afirmar lo que no es cierto.
Que si es borracho decían,
jugador y hasta putero,
que abandonó a la familia,
por unos cochinos euros.
El ya no gira la cara
cuando relatan los hechos,
unos hechos inventados,
por cuatro envidiosos viejos.
El sigue cabeza alta
paseando por el pueblo,
con su conciencia tranquila,
mas...con dolor en su cuerpo.
Quisiera plantárles cara,
cuando oye cuchicheos,
es mejor dejar que hablen
se lo responde en silencio.
Y así sigue su camino,
sin hacer caso de aquello,
que por una mala lengua,
es comidilla del pueblo.
Yo lo veo cabizbajo,
taciturno y con derecho
a cortarles de un plumazo
el dolor que le han impuesto.
Y en más de una ocasión
a punto estuve de hacerlo,
lastima que yo no pueda,
salir de donde me encuentro.
que de ser un alma libre,
les iba a cortar el cuento,
a esas víboras que en misa
se dan los golpes de pecho
y en cuanto ven un incauto
lo despellejan entero.
© Nana Schmith.

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