lunes, 23 de agosto de 2010

Rincón de Siera Morena


Suena en las noches de luna,
el rasgar de una guitarra
y en sus cerro se hace eco,
el sonar de una plegaria.
.
Rompe en el cielo una estrella,
sus colores en la noche
y a los pies de mi Patrona,
se posa, cuál bello broche.
.
Su mar de olivos la mece,
y su historia milenaria,
va acurrucando mi villa,
formando ríos de plata.
.
Los que nacen de su entraña,
como el plomo de sus venas,
gritan , orgullo y coraje,
desde esta sierra morena.
.

Fortaleza Bañusca





Cada noche aquí en mis playas,
sueño en mi tierra lejana,
en sus sierras de pizarras
y en sus caminos de jaras.

Sueño con su mar de olivos,
ondeando en las mañanas
y en sus caminos abruptos
que su sierra nos regala.

En esa caza furtiva,
otros tiempos que pasaran.
cuándo daban alimento
a mi pueblo y a su casta.

Sueño en esa fortaleza,
mora y cristiana engarzada,
oteando el horizonte,
de aquella Castilla hermana.

Y me veo de odalisca
en sus patios reflejada.
En las jaimas…plata y bronce
y en sus torres veo las lanzas,

dispuestas a la defensa,
de estas tierras conquistadas.
Poco le queda ya al moro,
aquel, que lucha en Granada

Y por los llanos manchegos,
se oye la cabalgada,
de los armados cristianos.
¡Cruz en ristre ¡ en mano…lanza,

vienen a limpiar las tierras,
de las hordas musulmanas.
Ya avanza lenta la luna,
sobre las aguas de plata

y en mis playas se reflejan,
los ecos de la batalla.
Y por ese mar de olivos,
por el camino a Granada,

con el dolor en los rostros
y el sentimiento en el alma,
con sus lanzas y sus tules,
sus mujeres y sus jaimas,


vencido se marcha el moro,
no sin dolor va su marcha,
que perdió su fortaleza,
perdió pueblo y perdió patria.
La que antes fuera mora
ahora es mi tierra cristiana.

Dolor de Madre





En la mar de mis recuerdos... me aposento,

y en sus aguas, con bravo desafío...

esparzo los recuerdos, que... un día fueron míos.
No quiero recordar...pues si lo hago,

el dolor corroe mis entrañas

y sin embargo... deslío la maraña del recuerdo.

¿Cuándo empezó mi vida? y, no lo encuentro,

por más que quiera buscar... no hay sentimiento,

en su lugar... !dolor indiferencia!!

rabia e impotencia! a no poderte revelar porque...

eres niña y...no creciste nunca,

si lo hiciste...los demás, robaron tu presencia,

quizá... tu adolescencia,

seguro por la envidia, de ver que no pudieron tener,

aquello que a ti se te ofrecía.
Sentiste el dolor, de tus alumbramientos,

y sin parir...les diste vida.

Intentaste luchar, sin una lista de deberes y derechos,

la carrera de madre... no habías hecho,

esos estudios... no existen todavía,

se aprende... de la vida y de los hechos

¿quien te enseñó a ti a amar? si no sabían.

Te inculcaron odio y... no lo diste,

en su lugar... ofreciste tu pena,
enseñaste que no existen las condenas,
por no ofrecer amor, si no lo tienes

y...¿que te han dado a cambio? ¿amor...indiferencia?
Guardaste su inocencia, en cofres con mil llaves,

labraste su futuro, con esfuerzo,

caíste cien veces y...cien te levantaste,

tropiezo tras...tropiezo, sin que nadie te asgue*.
Llegaste hasta una meta, que nunca te marcaste,

pero... no conseguiste, que nadie te premiase.

Y...sigues pesarosa, porque... el dolor te invade.
Y le escribes al viento...con una letra infame ,

para que no se entienda...ese !dolor! de madre

Pasado presente









L a mirada hacía atrás…melancólica ausente,
recordando una nada, despreciando un presente.
En mis ojos la lluvia…ya no vuelve de nuevo,
se apagaron las risas, la ha invadido el silencio.
En sus cuencas abiertas…se refleja un pasado,
que ha marcado con fuego, un presente olvidado.
En mis noches sin días…solo queda latente…
las heridas marcadas, ese dolor ausente,
que se teje en silencio, cuál maraña de humo
y que ahonda en mis carnes, cuándo a odio rezúmo.
En el vientre del mundo, se gestaron historias,
que ha parido a destiempo, mi pesada memoria,
dando a luz…un engendro, de amarguras y momias.
En los picos más altos, de las grandes montañas…
deposito mis sueños, sé que el viento los lanza
hacía los derroteros, de mi vana esperanza.
En letargo de nuevo, quiero ser la semilla,
que germine en un vientre, donde no exista ira,
que los genes salvajes…se los coman los lobos,
que se forme ese feto, olvidando lo todo.
Es inútil la lucha, por borrar el pasado,
La semilla es la misma, aunque…en vientre alquilado

sábado, 21 de agosto de 2010

XIV Certamen de Poesía "Pepa Cantarero" Baños de la Encina



Primer premio Local
Ana cortes Nieto
"Nana Smith"





Ego



Me preguntas si estuve
y, no, no respondo,
no voy a verme envuelto en mi marea,
de amores odios o venturas,
ni amar en un segundo, el odio y la venganza.
Ni quiero ser la brizna o el polvo
de un camino desandado.
Soy, el laberinto de sueños sin mentiras,
el correr del agua en el arroyo perdido,
en los troncos de los árboles muertos,
el vapor que flota en la atmosfera del tiempo.
No existe la verdad en los sueños,
es todo opaco o cegadora luz,
de astros oprimidos.
Es, el no ser siendo y el no estar,
queriendo ser, parte integra del todo.
Es lodo, a veces cenagal,
de costumbres imperfectas, que avasallan.
El yo imperturbable, se muestra ante el espejo,
inexistente, irreal, pero palpable
al ego que te ahoga y oprime con fuerza.
La frente con sudor, lívido el rostro,
la garganta que oprime tus palabras,
el no saber si la noche es claridad
o el día es noche, si saldrá la luna
como siempre o...quedará oculta
en los pliegues del pasado.
No, no me preguntes, mas no era yo,
pudo ser, el ego que abraza mis sentidos.

Te escribiré un poema de amor o desamor
te dejaré mis letras prendidas en el aire.
Y sentiré que sueñas en mis noches,
que abres tu ventana, al tiempo de mis días,
y quedaré escondido en laberintos nuevos,
trenzando con estrellas fantasías,
navegando en el mar de tus recuerdos,
cuando mi barca surque el océano,
azaroso y gris de mis tinieblas,
quedo, entre nubes de algodón de azúcar,
soñaré que se bañan nuestras almas,
en transparentes, cristalinas
metas de evocación nocturna
y de lamentos grises.

Atraparé las aves con mis manos
esas que vuelan del alma al infinito,
y en madrigal de espumas,
labraré lamentos, en corazón de piedra,
resurgiré de mi nada, para llegar
al todo de tus días y sembraré ramilletes
de bellas esperanzas.
Olvidaré el dolor, de las paredes viejas,
techaré, tu casa, con la sombra
infinita, que siempre te acompaña
y amoblaré tu corazón,
con mimbres amarillos,
colgaré en las ventanas de tus ojos
la belleza imperturbable de la rosa,
y moriré de amor si es necesario,
para volver a nacer con el ímpetu
de las olas, que rompen, en las rocas
que yacen oscuras, impertérritas,
en el fondo de mi mente.
Te pediré que vuelvas. y alojes tu verdor,
tu negro fruto,
en las entrañas profundas de mí ser,
que arropes mis sueños con tu luna,
que invadas mi estancia.
con el profundo aroma de tus jaras,
el olor de tus patios en estío,
el jazmín que en mi infancia
me arrullara, en las tardes de siesta.
o el trueque de viejas alpargatas,
por el enorme cucurucho de torraos.
Ya ves, a lo que me lleva,
el laberinto infinito del recuerdo.