viernes, 11 de mayo de 2012

Tu Nombre







Tu nombre me lo grabaron
A fuego sobre mi pecho,
y  en Tu figura rimando,
volaron todos mis sueños.

En tu océano de olivos,
se quedaron mis pesares,
siempre estuviste conmigo
 Soberana en los altares.

Virgen Madre de mi pueblo,
Chiquitilla en esa encina,
la que en su fruto dibuja,
Tu dulce imagen Divina-

Tu manto cubre la sierra
Y mi Villa en altozano,
Tu mano cubre los rostros,
de mis paisanos y hermanos.

De tus manos pisé el agua,
de aquellas playas lejanas
y fue tu mano la guía,
que a mis dos tierras, hermana.

¡Viva mi Virgen bonita ¡
Reina y Señora te llaman,
Santa Madre de la Encina
de  mi Villa…Soberana

Palabras


Palabras
tan solo ...palabras,
a veces habladas,
a veces...escritas,
a veces amantes, y
a veces...malditas.
Palabras
que anuncian...
futuros inciertos
que en ocasiones,
se las lleva el viento.
Si quedan, se clavan
con tal ironía,
que de ser amables,
matan alegrías
A veces te sirven,
para hacer amigos,
y otras tantas veces...
crean enemigos.
Por eso...
es mejor, no decir palabra,
callar... la omisión,
a veces te salva
Pero...
el ser humano, emite palabras.

Palabras



Para que no me olvides





Para que no me olvides
me adentro en tus pensamientos,
y sueño que estas dormido.
Aunque sé que estas despierto
Para que no me olvides
voy tejiendo amor y besos
y entre nubes de algodones
los pongo en el firmamento
Para que no me olvides
le pido a la luna versos
y a los luceros y estrellas
hago bailar en el tiempo
Todo porque no me olvides
por seguir en tus recuerdos,
porque tu alma y la mía...
sean una sola en el tiempo

domingo, 6 de mayo de 2012

Hoy quisiera


Hoy quisiera decirte, que ya no te quiero,
que hacia ti, sólo siento el calor del recuerdo,
hoy quisiera que todo quedase dormido,
como quedan los sueños, cuando llega el olvido.

Mas no puedo expresar lo que siento,
sin creer que te he herido,
tus palabras me llegan de lejos, como los suspiros
,anudando a mi cuello sus notas, cual amor dormido.

Y no puedo decir que te amo, nunca te he querido,
siempre fuiste en mi vida una sombra,
yo, tu árbol herido, por un rayo siniestro,
que quebro las ramas ahogando los trinos

No me distes amor, solo fue cariño,
Hoy quisiera volar nuevamente por campos de trigos
y posarme en las ramas del viento, piando bajito,
y romper las cadenas del tiempo, al son de mis trinos.

¿Democracia?




.
Y...gritan con fuerza a una justicia,
que el tiempo, ya otorgó,
queriendo revivir aquella inquina,
olvidando el daño que causó.

Quedo se a barlovento la ignominia,
la barca a sotavento, naufragó,
se agarra el naufrago a la quilla,
lo único que el viento no arrasó.

Desnudo de verdades, vestido de mentiras
hoy luces...con falsa democracia
tu rabia y tu osadía, lanzas al aire...
destellos de venganza.

Tiras la piedra, pero...escondes la mano,
pan para hambrientos, justicia de tiranos.
Bajo la piel de cordero, yace el lobo
sediento de la sangre de su hermano

sábado, 5 de mayo de 2012

Te Recuerdo

Camino por sendas de olivares,
 por laberintos rotos de encinas y pinares,
y siento mi memoria sobre las viejas piedras,
a reposar recuerdos, mientras mi mano inquieta,
rebusca en los bolsillos del pasado,
por encontrar un algo que traiga tu recuerdo.
Ardua noche que cansó nuestros cuerpos,
esperando el momento en que la fiera acuda,
me despierta el sonido de una vieja escopeta,
y tus pasos ligeros que llegan hasta mí,
con el fusil al hombro y la canana prieta,
recorremos el monte, que nos hizo vivir.
La noche se ha dormido en letargo en el tiempo,
con la aurora marchaste, sin dejar un adios,
mas tu sombra persiste en todos mis recuerdos,
 el calor de un amigo, que nunca me dejó.


In Memoriam

martes, 1 de mayo de 2012

Los Archivos del sueño







Una vez recordaba tu nombre,
tu presente de niña tu faz compungida,
sentía el dolor, que en mi mente cansada,
corría, cuál caballos salvajes,
por el val. de la vida.


He serenado el alma, casi, acabé la vida.
 Hoy repaso el archivo del sueño,
buscando sin iras, cualquier rastro
que exprese constante, los daños que hice.
 No quiero mentiras.

Si erré a conciencia, si amargué las vidas…
sabiendo serena el daño que hacia.
 No merezco tu voz ni tu aliento.
 No merezco la vida.

Si luché contra el viento, en las noches perdidas.
 Si busqué en las estrellas y en las aguas bravías,
la esperanza y la fe en un mañana.
 ¡Cierra ya la herida !