sábado, 23 de noviembre de 2013

Mi Villa


Rompe la tarde en colores,
de pajiza fantasía
y a lo lejos, en los montes,
oculta el sol su osadía.

Verde a negro, se transforma,
su sierra en la lejanía
y el cielo muestra su porte,
con un azul que encandila.

Poco a poco, el firmamento,
va mostrando sus luceros,
y sus estrellas le muestran,
al caminante el sendero.

Oteros llenos de encinas,
dispersos en su paisaje,
mi villa majestuosa,
va mostrando su linaje.

Fortaleza califal, soberbia
va en su montura,
al mundo le va mostrando
su lejana arquitectura.

De su almena principal,
se divisan suavemente,
el verde de sus olivos,
el orgullo de sus gentes.
© Nana Smith

viernes, 22 de noviembre de 2013

Te recuerdo


La casa está vacía, aún huele a incienso,
las rosas se marchitan solas en el jardín, 
ya no mana tu fuente, aquel agua de vida
y las jaulas vacías, se quedaron sin ti,
los pájaros volaron, en busca de otros cielos,
cuándo tú te marchaste, hasta el viento cesó.

He abierto las ventanas, corrido las cortinas,
para que entre el aire, en este amanecer,
y respiro el aroma, de las cosas perdidas,
y huelo la fragancia, que tú llevaste ayer,
vuelvo sobre mis pasos, cansados ya de vida,
recordando los tuyos, en el atardecer

y te veo erguida, sobre tu esbelto cuerpo,
y siento tu mirada, pasar por el salón,
con tus ojos de gata, iluminas la estancia,
queriendo comprobar, que todo se quedó
en los viejos estantes, de aquel aparador,
que siendo yo muy niña, amé con ilusión

y suenan tus palabras en el espacio tiempo,
y oigo que me dices, es tuyo, tómalo.
Un golpe en los cristales, me ha traído de nuevo,
al portal con macetas, y al almendro sin flor.
desde que te marchaste, todo quedó seco,
solo tu llama brilla, aquí en mi corazón

© Nana Smith